el arte contemplantivo
DONDE CREATIVIDAD Y MEDITACIÓN CONFLUYEN
¿Cómo se produce esta convergencia?
Más que declaraciones visuales singulares, mis obras son objetos reflexivos donde el significado emerge de la meditación sostenida.
La primera parte del trabajo, la de la composición, es espontánea e intuitiva. El color de la acuarela, el guache o la tinta china forma una mancha simple, una esfera, un enso… a continuación busco una forma de permanecer presente en el papel. Una de mis técnicas habituales es la utilización de patrones gráficos muy pequeños (círculos, rayas, perforaciones,..) cuya intención es facilitar a través del ritmo, de la repetición y de la minuciosidad el silencio mental, el enfoque y la calma. Hay en ese tardar intencionadamente algo ritual, que se aproxima a la revelación de un secreto.
En el Japón del siglo XIII los monjes zen combinaron arte y filosofía en una unidad en la que función y meta confluye en un mismo lugar. También en mi vida se empezaron a aunar progresivamente estas dos dimensiones imprescindibles: la artística y la contemplantiva.
Los materiales que empleo son el papel de algodón, la acuarela, la témpera, el pan de oro… Dibujo, rasgo, perforo y hago marcas con pinceles, plumas de pájaro, punzones. Experimento sobre diferentes soportes: kraft, papel sulfurado, libros antiguos o maderas.
También me gusta la encuadernación japonesa, pintar sobre piedras, tejer sobre metal o en ramas de árboles y el dorado al agua.
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Con la adquisición de mis obras colaboras con la continuación de Espacio Interior.
Mis obras de arte son ventanas de experimentación, anhelo y llegada a una representación del silencio original. En cada trazo encontrarás la profunda conexión entre el arte y la contemplación.
Horarios de apertura de Abril a Noviembre de Lunes a Domingo 10am - 8pm